domingo, 27 de marzo de 2011

MÁS DE VIDA INTERIOR

302. Tu Crucifijo. –Por cristiano, debieras llevar siempre contigo tu Crucifijo. Y ponerlo sobre tu mesa de trabajo. Y besarlo antes de darte al descanso y al despertar: y cuando se rebele contra tu alma el pobre cuerpo, bésalo también.

El símbolo que nos representa a todos los cristianos en común es la cruz de Cristo. La cual nos hace vivir la pasión sobre nosotros y verla justifica todos nuestros actos. Por ello tengamos con nosotros un Crucifijo que nos recuerde que cargamos cada quién con nuestra propia cruz y nos demos cono Jesucristo lo hizo por nosotros en nuestras actividades cotidianas.

Por ello, que al trabajar, recuerdes que ese trabajo es tu cruz al verlo postrado en tu mesa o en tu lugar de trabajo. Darle un beso al descansar y al despertar para darle gracias de que te dé ese merecido día más de vida por el que te has dado en todo por tu cruz. Que al verlo te de fuerza y recuerdes que Jesucristo nunca cedió en su pasión y nosotros tomemos las riendas como Él lo hizo cuando más sufría.

Vivamos adorando a nuestra cruz y viviendo por ella para ofrecerla en sentido de nuestras vidas como su vida fue. Que nuestro Crucifijo nos represente en nuestras vidas y nos dé fuerza de seguir siempre ante todo.

Alex Arriaga

sábado, 19 de marzo de 2011

VIDA SOBRENATURAL

280. Si pierdes el sentido sobrenatural de tu vida, tu caridad será filantropía; tu pureza, decencia; tu mortificación, simpleza; tu disciplina, látigo, y todas tus obras, estériles.


Nuestra vida tiene una parte física y otra sobrenatural, la cual la que prevalece y nos conduce a Dios es la segunda misma. Es aquella en la que nos habla el Espíritu Santo y nos lleva a realizar las cosas en base a las manos de Dios mismo. Siempre, en cada acción, Él nos guía y nos motiva a hacer todo en la vida.

Por ello, al perder este sentido de tener en presencia a Dios en todo nuestro actuar nos conduce a que se convierta aquello que al darnos por los demás sólo sea amor por ellos, la pureza en vuelta a lo respetuoso, nuestra mortificación en algo sin el valor adecuado, la disciplina algo que nos deje con miedo a hacerlo y nuestras obras carecerán de vida y se marchitarán.

Sepámonos hijos de Dios y vivamos siempre en presencia de su Espíritu Santo, para convertir todas nuestras obras se hagan fértiles y prosperen para darnos con alegría a los demás con esa sabiduría en nuestro actuar como manos de Cristo. No nos perdamos en el infinito de no pensar que nuestra vida sobrenatural actúa dentro de nosotros mismos.

Alex Arriaga

martes, 8 de marzo de 2011

PRESENCIA DE DIOS

266. No tomes una decisión sin detenerte a considerar el asunto delante de Dios.


En todas las decisiones que tomes en la vida debes de considerar la opinión de Dios. Pues no sabemos que nos puede deparar cada camino que tomemos y en cada situación. Tal vez tu Padre quiera algo más de ti acerca de este vano momento y requieres su sabio consejo.

Trata de frecuentar a Dios en tu oración y pide que te de esa señal que esperas para saber qué hacer ante tal conflicto de tu toma de decisión. Él te ama y quiere lo mejor para nosotros, pues escuchémosle para saber cuál es la mejor opción para nosotros y nadie más. Somos sus hijos y como tal podemos vivir conforme a su paz que nos lleve a la felicidad eterna.

No tengas miedo de decidir algo, somos libres, pues somos hijos de Dios todopoderoso. Pero nunca olvides de tomar en cuenta su opinión y su consejo para seguir adelante.

Alex Arriaga

jueves, 3 de marzo de 2011

ESCRÚPULOS

259. ¡Todavía los escrúpulos! –Habla con sencillez y claridad a tu Director.
Obedece… y no empequeñezcas el Corazón amorosísimo del Señor
.


Esas dudas que te hacen parecer indigno de servir al Señor te han separado de Él mismo. A veces aparecerán en tu vida pero hay que rechazarlos a pesar de lo grande que sean. Intenta comentarlo a tu Director y saberte digno de tenerlos, pues te has dado cuenta y puedes quitarlos de tu vida.

Trata de escuchar más allá de lo que creas que oyes. Todo en la vida es más claro que la misma agua pura, sólo tienes que aprender a ver con el corazón. Dios quiere de ti algo grande y tú puedes escucharlo y seguirlo en tu vida de trabajo, con humildad y esfuerzo en cada circunstancia.

Vivamos pues alejando aquellos escrúpulos que nos pesan a veces dentro de nuestra vida y obedezcamos al Señor que nos habla siempre.

Alex Arriaga