lunes, 10 de mayo de 2010

DISCRECIÓN

639. De callar no te arrepentirás nunca: de hablar, muchas veces.


Cuando estés en un momento en el cual no sepas que hacer, no hagas nada. Siempre es mejor la prudencia y discreción que la inoportuna actuación en un evento intrigante, lo cual puede provocar lo peor. Al final provocarás un posible malestar que te atormentará durante mucho tiempo.

Nadie se ha arrepentido de callar en momentos donde no sabe qué hacer, muchas veces al actuar ante la duda provoca muchas bajas en la vida del cristiano. Trata de vivir a discreción en momentos donde no te debes de meter y no te incumben. Al ser llamado también actúa en forma discreta sabiendo callar cuando se debe.

Alude aquella frase tan famosa, la cual dice: Ante la duda, no se actúa.

Alex Arriaga